Le mires por donde le mires, Mao te sigue con su mirada.
Imagen de Mao Zedong que preside la entrada a la Ciudad Prohibida, y la gran plaza de Tiananmen. Lugar donde Mao proclamo la creación el día 1 de octubre de 1949 de la República Popular de China. Dentro de unos meses se celebrará el LX aniversario.
Esta imagen fue pintarrajeada durante las protestas de los estudiantes en 1989 en la plaza de Tiananmen. El manifestante que lo hizo pasó 16 años en prisión.
Hace dos años, un desempleado uigur llamado Gu Haiou de Xinjiang, intento quemar el retrato de Mao lanzándole un objeto candente de fabricación casera, dañando la pintura, el retrato fue inmediatamente remplazado. Si por pintar el cuadro son 16 años, no quiero imaginar lo que le habrá caído al uigur.
El retrato, de 6 metros de alto por 5 de ancho, pesa unas dos toneladas y es una reproducción de la cuarta edición del retrato del “Gran Timonel” que pende en este histórico lugar desde 1949, año en el que el líder comunista se hizo con el poder.
A pesar de los genocidios perpetrados por Mao como el Gran Salto adelante, que mató de hambre a 40 millones de chinos, o la caza de brujas masiva que supuso la Revolución Cultural, la figura de Mao es todavía idolatrada por muchos chinos debido a la falta de biografías veraces y debido a la propaganda oficial sobre su figura en el país asiático.
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