Rindo desde mi humilde blog un cariñoso homenaje a todos los que aquel día perdieron a sus seres queridos, a todos los que sufrieron aquel brutal atentado que mañana cumplirá su tercer aniversario. Un día para el recuerdo de todas las víctimas del terrorismo. Y yo también quiero saber. Saber que intereses mueven a ciertos individuos que mercadean con el dolor y la muerte de aquel día. Saber sí les compensa lanzar teorías conspirativas para luego rentabilizarlas en ventas de periódicos, oyentes o visitas en páginas de internet, y no se les remueve las conciencias de saber que están jugando con personas.
Llegará el día que la justicia ponga a cada uno en su sitio. ¿Y después? Y después nada, ellos se apuntarán al carro de que gracias a ellos se ha sabido toda la verdad, que su trabajo contribuyó para el esclarecimiento de los atentados, y que gracias a ellos estos moros han sido condenados. ¿Y de su famosa teoría? Ellos dirán que nunca conspiraron, que nunca estuvieron en la teoría de la conspiración, y dirán, que hicieron lo que hicieron porque ellos creían que era “su verdad”, se escudarán en que ellos tenían fuentes e investigaciones periodísticas, atacarán a los demás acusándolos de que los otros nada hicieron por descubrir la verdad, y que todo lo hacían en aras de esa verdad, y no pedirán perdón.
No, no pedirán perdón primero a las víctimas, no pedirán perdón a sus lectores, oyentes o internáutas, ni tampoco pedirán perdón a todos aquellos a los que han calumniado, ignominiado con sus mentiras. Y habrán ganado, porque a pesar de sus mentiras tendrán lectores, oyentes o intenáutas que seguirán creyéndose sus propias patrañas.
3 Comments
No suelo comerle la polla a todo el que leo pero estoy completamente de acuerdo contigo. Salud.
Gracias ganzúas, es que sino lo escribía reventaba.
Estoy completamente de acuerdo, pero como además estamos en una democracia todo esto debería quedar reflejado a la hora de emitir nuestro voto.