Hoy me he encontrado con dos nuevos inquilinos en mi casa, ya conocía la existencia del nido desde hace días, incluso pensaba que las idas y venidas de los pájaros (padres) eran para construir el hogar, pero lo que no sabía es que ya estaba habitada. Hoy los he visto asomar sus picos en busca de comida o de la madre. Ella, su madre que nos observa cuando entramos en el patio, vigilante desde la distancia que todo este bien en su hogar, es decir, mi hogar.
Y ya continuaré yo por Babia.
Y ya continuaré yo por Babia.
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