Protesta, sí. . . pero en ropa interior. Así lo ha determinado el Tribunal Superior de Justicia de Navarra ante la petición de la organización internacional People for the Ethical Treatment of Animals (PETA), que pretendía simular un encierro humano para protestar por la tradicional carrera pamplonica. Aunque la intención inicial era que los manifestantes acudieran desnudos, la condición para la autorización es que “porten cuando menos ropa interior”.
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